miércoles, 8 de agosto de 2007

Despertar



Es lindo despertar cada mañana y encontrar que la luz de sol me da los buenos días, pero ella desde hace algún tiempo esta muy celosa porque tu sonrisa me la da antes que ella,
porque no despierto sin primero haberte visto frente a mi y creer tenerte y ver como tus ojos me enloquecen y se apoderan total y plenamente de mis sentidos, a veces quisiera ser mas fuerte pero penetras de manera magistral mi caparazón y me tomas sin darte cuenta de qué haz hecho…




El roce de tus manos me domina y envía susurros de ternura a cada poro de mi piel… el toque de tus dedos ordena a mi cuerpo como moverse y de que manera acercarse a tu figura varonil y acomodarme a ti, sentir como entrelazadas nuestras manos me trasmites energía y tocas sin darte cuenta las profundidades de mi ser…



Me abrazas y cada parte de mi se estremece por completa y siento casi a plenitud la anatomía de tu querer, entro en total descontrol y no quisiera detener mis manos frescas para tocar y deslizar sobre ti mis uñas y responder a tanta expresión, a tal seducción, a esa empatía que nace y florece casi instantáneamente con tan solo tener tu presencia y que solo muestra la fuerte atracción que existe entre los dos…



Me besas y es como si me arrancaras la vida con tus labios y pasa todo en mi alrededor, nada existe mas que tu y yo y solo lo que siento en mi y lo que me sostiene, el hombre que me sujeta y que me envuelve está en mi mente en ese momento… y es como si tienes el poder de hacerme doblegar completamente a ti y conviertes todo lo irreal en mi nuevo mundo, el lugar del que no me quisiera marchar…



Sentir tus labios es sentir el mas sabrosos de los frutos, lo mas dulce en mi paladar, los mas sutil y suave en mi y simplemente querer que la vida se detenga en ese momento para que no se acabe semejante momento celestial y también quisiera que mi cuerpo sea fuerte y resista tan excitante momento y no desmayarme sin antes haber llegado a la cúspide de ti.



Sentir tu aliento es lo que despierta aun mas mi apetito de aquel hombre que ríe y sabe que le quiero, de aquel hombre que vive, hombre que sueña, hombre que lucha, hombre de espíritu emergente, pero sobre todo de aquel hombre que ama y desea confortarme, del hombre que tiene la mirada seductora y la sonrisa inocente, energía volcánica y sutileza de niño.

Danaluna

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